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¿El estrés puede provocar cáncer?

  Este artículo fue redactado y avalado por la nutricionista: Lic: Fernanda Ramirez
¿El estrés puede provocar cáncer?

¿El estrés puede provocar cáncer?

Múltiples investigaciones médicas han resaltado las consecuencias negativas del estrés en la salud. El estrés produce cambios biológicos tanto directamente, a través de las hormonas del estrés, como indirectamente, por asociación con otros hábitos poco saludables: fumar, abuso de alcohol, conducta alimentaria poco saludable (abuso de alimentos, consumo excesivo de dulces, etc.).

El estrés destruye el sistema inmunitario, aumenta la predisposición a la enfermedad en general, pero incluso puede influir en la aparición del cáncer. No solo los adultos están estresados, sino también los jóvenes y los niños que van a la escuela.

El estilo de vida poco saludable de la infancia y la adolescencia, caracterizado por el estrés, el estilo de vida sedentario y la dieta poco saludable, pueden ser una explicación del inicio del cáncer a una edad cada vez más temprana. Se ha descubierto que las personas que viven en conflicto en la vida familiar o social, que no pueden perdonar, que viven llenas de tristeza y emociones negativas son más propensas al cáncer.

La medicina psicosomática  demuestra, con base en numerosas investigaciones, la importancia de la vida mental en la aparición de enfermedades somáticas. Según esta ciencia médica,  los conflictos mentales prolongados producen enfermedades orgánicas irreversibles.

El alto estrés único, que ocurre repentinamente y tiene un fuerte impacto emocional que la persona afectada internaliza o no comparte con sus seres queridos (por ejemplo, la muerte de un ser querido, el divorcio, la pérdida de un negocio, etc.), puede llevar a la aparición repentina de cáncer.

En tales situaciones, el equilibrio de la vida mental es crucial. Por ello, debemos estar preparados para controlar o evitar tal estrés.

¡Detectado temprano, la mayoría de los cánceres se pueden curar!

El cáncer no duele, no tiene síntomas hasta las etapas avanzadas.

Si se detecta temprano, el cáncer se puede curar en la mayoría de los casos.

Cuanto antes se descubra, mayores serán las posibilidades de un tratamiento exitoso.

Los descubrimientos más importantes en el campo de la investigación médica han resaltado el hecho de que la mayoría de las formas de cáncer no se explican por la herencia genética y no son la consecuencia inevitable del proceso de envejecimiento. El cáncer es más bien el resultado de la influencia que el medio ambiente y el estilo de vida tienen en la salud del cuerpo.

Este es un paso importante en la lucha contra esta enfermedad, lo que significa que casi tres cuartos de los cánceres que afectan a la población en general se pueden prevenir cambiando los hábitos diarios.

La prevención del cáncer se realiza durante toda la vida. Elegir un estilo de vida saludable, desde la infancia y mantenerlo hasta la vejez, puede protegerlo del cáncer y otras enfermedades crónicas.