Gripe: cómo podemos evitarla
Es mejor prevenir que curar: esta verdad también se aplica a la gripe, para la cual la temporada comienza a fines del otoño y termina aproximadamente en marzo.
El virus de la gripe se transmite a través del aire por gotitas de las secreciones respiratorias al toser y estornudar. De esta forma, nos contagiamos cuando estamos cerca de la persona enferma.
El virus también se propaga sobre la piel de las manos con las que tocamos al paciente o los objetos que ha tocado.
Por lo tanto, en la temporada de gripe, es muy fácil enfermarse cuando viajamos en transporte público y tocamos lugares que anteriormente fueron tocados por alguien enfermo. Desde la piel de las manos, el virus ingresa al tracto respiratorio al tocarse la boca, la nariz o al ingerir una comida sin lavarse las manos. Por esta razón, durante una epidemia de gripe, una de las recomendaciones de prevención más importantes es el lavado de manos frecuente.
La importancia vacuna contra la gripe
La vacunación contra la gripe es la forma más eficaz de evitar enfermarse. Este año, las vacunas están disponibles a partir de septiembre. Lo ideal es que te puedas vacunar en otoño, aunque la vacuna también se puede tomar en enero para protegerte en los meses de mayor cosecha (enero-marzo). La efectividad de las vacunas, sin embargo, no es del 100%, mayor en personas más jóvenes y generalmente sanas, menor en ancianos y quienes padecen enfermedades crónicas. Por lo tanto, incluso las personas vacunadas deben seguir reglas de higiene que reduzcan el riesgo de enfermedad.
Lávate las manos con frecuencia
Dado que el virus de la gripe puede existir en la piel de las manos, es bastante fácil transferirlo al tracto respiratorio, por lo que es muy importante lavarse las manos con frecuencia. Nos lavamos las manos durante unos 20 segundos con agua tibia y jabón o desinfectamos con un agente a base de alcohol en las siguientes situaciones:
- después de cada contacto con una persona enferma
- después de usar el baño
- antes de comer o tocarse la boca y la nariz
- después de regresar a casa
- después de lavarse la nariz o cubrirse la boca al estornudar y toser
Durante la temporada de gripe, es una buena idea usar toallas desechables para secarse las manos. Si desinfecta sus manos con un agente a base de alcohol, frótelo en sus manos hasta que se seque. Estas reglas deben ser seguidas tanto por personas sanas, para evitar enfermarse, como por aquellas que ya padecen gripe, para no contagiar a otras personas.
Otras reglas de higiene para la temporada de influenza o gripe son:
- Cúbrete la boca con un pañuelo desechable al toser o estornudar.
- Tira los pañuelos a la basura inmediatamente.
- Si no tienes pañuelos, cúbrete la boca con el antebrazo, no con la mano.
- Lávate bien las manos después de toser, estornudar o limpiar la nariz.
- Trata de no tocarte la cara con las manos sin lavar, especialmente la nariz y la boca.
- Evita las grandes multitudes de personas tanto como sea posible.
- Ventila las habitaciones en las que te encuentras a menudo.